Autor: El Portador de la Bandera de Jarh wa Ta’deel Sheikh Rabee Ibn Hadi Al-Madkhalee (hafidhahu Allah)
Fuente: www.sahab.net
Traductor: Abu Abdis Salaam Siddiq Al Juyaanee
Pregunta:
(¿Es correcto para) el que llama a la gente hacia Allah (daa’ee) que está sobre el Minhaj (metodología) de los Salaf, el mezclarse de vez en cuando con un grupo partidista (es decir, Hizbi) de los hizbis con la intención de aprender de sus errores, de sus secretos, de sus asuntos secretos y sus corruptas ideologías (con el fin de) para así librarse de ellas y dejar en claro a la Nación (Islámica) los errores (de estos grupos hizbis) de modo que puedan ser advertidos de ellos?
(¿Es correcto para) el que llama a la gente hacia Allah (daa’ee) que está sobre el Minhaj (metodología) de los Salaf, el mezclarse de vez en cuando con un grupo partidista (es decir, Hizbi) de los hizbis con la intención de aprender de sus errores, de sus secretos, de sus asuntos secretos y sus corruptas ideologías (con el fin de) para así librarse de ellas y dejar en claro a la Nación (Islámica) los errores (de estos grupos hizbis) de modo que puedan ser advertidos de ellos?
Respuesta:
Por Allah digo, Oh hermano mío, es suficiente para ti que esos grupos hizbis con los que te mezclas ya hayan propagado sus desviadas ideologías y que los ‘Ulamah ya los hayan refutado; ¡no te expongas (y abras) a ti mismo hasta perderte! Realmente, mucha gente se ha hecho parte de esto exactamente por la misma razón que luego de un tiempo da lugar a que sean absorbidos y arrastrados por el asunto y (más tarde) acabados por ellos. Así que el Creyente debe tener cuidado y ser cauteloso. ¡Los Salaf no se mezclaron con los Jahmiyyah, los Mu’tazilah, ni los Khawaarij con el propósito de rectificarlos! Por lo tanto está en ti estar sobre el camino de los Salaf, que Allah te bendiga.
Las malas compañías y mantener estas malas compañías te harán daño. El ejemplo de la buena compañía y la mala compañía es como el ejemplo del vendedor de finos perfumes y el herrero. El vendedor de perfume, puede que o, te de una muestra gratis como un regalo, o le puedas comprar algún perfume, o (al menos) le encontrarás un buen aroma. Mientras que el herrero podrá o quemar tus ropas (debido a las chispas cuando se quema), o le encontrarás a él un aroma desagradable.
Así que está en ustedes ¡oh hermanos míos!, el acompañarse de aquellos que son rectos, la gente piadosa, aquellos que se abstienen de los asuntos/cosas por temor de caer en lo que es prohibido, aquellos que se abstienen de los asuntos mundanos y/o de aquellos asuntos que no les benefician, y aquellos que tienen respeto por la Sunnah (es decir, aquellos que están sobre la Sunnah). Esos son las buenas compañías y las buenas reuniones. Tengan cuidado de (y apártense de) sentarse con la gente de los deseos, porque ciertamente ellos tienen errores con ellos. Es posible que ellos gradualmente puedan atraerlos y ponerlos a prueba. Uno puede decirles, “Háganse socios de ellos y rectifíquenlos desde dentro”, pero ellos nunca se rectificarán a sí mismos excepto por esto y quien Allah quiera.
¡¿O piensas que aprenderás de ellos (haciendo lo que has mencionado)?! Esta no es la vía del Islam; el Islam no apoya esto, que Allah te bendiga. Te aconsejo el no mezclarte con ellos no importa con qué excusa. Esto es porque ya su mal se ha generalizado, se ha hecho conocido hasta el nivel de haber alcanzado las explosiones, la destrucción y la devastación. Yo ya he escrito y refutado a Sayid Qutub así como a los Ikhwaan (es decir, la Hermandad Musulmana). (De hecho) ellos mismos han escrito, dejado en claro (e ilustrado sus corruptas ideas) en sus propios libros, mientras que no se dan cuenta. Tu tienes suficiente Oh hermano mío. Por Allah, (este es el caso) excepto si hay un sabio Salafis que se embarque en dar da’wah a quien é espera que acepte la verdad, entonces esto es por él, y bien para él, (el SABIO Salafi). Y más bien, es obligatorio para él el darle la da’wah y clarificarle la verdad. En cuanto al Salafi que es débil en conocimiento y personalidad, entonces es obligatorio para él alejarse de ellos de manera que pueda estar protegido y guarde lo que tenga en él de la verdad y no hay nada comprable para estar seguro.
Traducido al español por Umm 'Isa.